Hotel con encanto, coqueto, cuidado y...
Hotel con encanto, coqueto, cuidado y romántico.
Se nota la ausencia de niños, una pena que no se hubiera construido algo mas alejado de la carretera, los coches se oyen desde la piscina.
Servicio atento, y bonita arquitectura y jardín en una bonita casa señorial antigua.
Se puede llegar andando al mar, y ha sido renovado hace poco, muy recomendable.