ANADEL
Lo mejor es su ubicación
A pocos pasos del arco famoso, del centro con su preciosa plaza mayor, y con unas bonitas vistas desde lo alto sobre los campos.
Se trata de un moderno hotel con pretensiones, un magnífico desayuno, pero con un personal escaso de profesionalidad ( me refiero a la recepción), y con unos detalles que habría que corregir.
Sería un detalle no cobrar diez euros por sentarte en un sillón de masaje que es gratis en muchos sitios, y el precio del spa es desmesurado.