Hotel moderno aunque algo lioso
Sin duda alguna este es el hotel más extraño en el que me he alojado nunca. Más que un hotel parece un laberinto. Situado muy cerca del puerto de Klaipeda, la verdad que el hotel está realmente bien. Se trata de un 4 estrellas y la verdad que eso se nota en sus instalaciones, desde luego y en especial, en las habitaciones. Muy completas y con un diseño especialmente cuidado.
Pero eso si, el hotel en si es un poco caótico. Demasiado grande, demasiadas habitaciones, demasiadas puertas, demasiadas secciones. lo que hace que se una aventura el llegar hasta cuarto (y no te quiero decir ya el ir a desayunar). El problema es que el hotel forma parte de un gran complejo que incluye un centro comercial y discotecas. De hecho en los bajos del hotel hay una discoteca bastante animada por la noche (aunque he de decir también que en el cuarto no se oye nada de ruido). La solución que nos proponen para llegar a los distintos lugares es seguir las líneas del suelo, que te van indicando por donde ir para llegar a los distintos sitios, pero repito, se hace algo costoso, pues has de ir esquivando puertas, ascensores y otras secciones del complejo.