supercastell
Un hotel con vistas
Muy bien situado para poder a todas partes a pie. En el restaurante nos atendió una escocesa de película, daba mucho miedo y no solo por el vozarrón.... que nos reñía cada vez que juntábamos las mesas para sentarnos juntos y le desorganizábamos el comedor.
Las habitaciones pequeñas pero limpias y cómodas.