Cerca de Plantage
EL Hotel Arena de Ámsterdam es uno de los más singulares en los que me he alojado nunca. Tiene muchas reformas, de hecho, ha sido capilla, orfanato o albergue para mochileros antes de lo que es ahora, un hotel moderno, con diseño minimalista y muy peculiar.
Está ubicado cerca de Plantage, aunque esto no es un problema, ya que hay un montón de tranvías que te acercan a donde tu quieras llegar. La decoración es bastante espartana.
Cuando llegamos no quedaban habitaciones económicas y nos hicieron un upgrade. Disfrutamos de una habitación gigante, con techos altísimos, con una gran cama, pero con una decoración escasa. El armario era una taquilla de colegio, para que os hagáis una idea. Sin embargo, el conjunto era muy peculiar, sobre todo, el diseño, que me pareció atrevido e industrial a la vez.