Hoces del Júcar

Si uno quiere quedar gratamente sorprendido en la llanura manchega albaceteña, solo tiene que ir a las hoces del Júcar entre Valdeganga y Alcalá del Júcar. De la sencillez de un paisaje plano de la Manchuela, se desciende a un cañón de mas de 100 m. De desnivel atravesado por un río muy natural con un bosque de ribera merecedor de ser considerado Lugar de Importancia comunitaria por sus habitats y ZEPA por sus rapaces.

Allí se pueden ver varias pedanias: Alcozarejos, Maldonado, Calzada de Vergara, etc. Y Cubas la mas grande. Todas ellas son poblaciones de casas cueva que nuca se han llegado a abandonar por la pobación, por lo que resulta un paisaje etnológico de latísimo interés.