Naturaleza y tranquilidad
Después de hacer un día de ruta recorriendo las cuevas cercanas a Thakhek, hicimos una parada a comer cerca del puente sobre Huay Xieng Liap y el pueblo de Ban Songkhone. Desde allí nos acompañó una niña por un sendero hacia un espectacular acantilado, por donde entramos a una cueva de piedra caliza impresionante (Tham Xieng Liap). Al salir de ella, casi de noche, aparecimos en medio de un bosque, rodeados de inmensos acantilados y con el único sonido de las aves e insectos de la zona. Delante nuestra, las preciosas y sencillas cabañas de este pintoresco alojamiento del centro de Laos.
Sus dueños nos trataron muy bien, Tanja y Uli, una pareja de alemanes amantes de la escalada y la naturaleza. Dormimos por unos 4 euros/persona, cenamos allí mismo y pudimos descansar para proseguir nuestra ruta por el país.