Calzada del Gigante

Fui por trabajo a Belfast y desde allí aproveché con gente del lugar para hacer un poco de turismo por Irlanda del Norte. El viaje fue muy económico, en Easyjet desde Alicante hay un vuelo directo a Belfast. Los paisajes aquí en el norte son increíbles aunque el tiempo, en enero, no es demasiado bueno. Un día me llevaron a ver The Giant´s Causeway y tengo que reconocer que es de los entornos naturales más impresionantes que he visto. Estas columnas de basalto por toda la costa superan cualquier espectativa. Si huviera un listado de las 7 maravillas del mundo referidas a entornos naturales no tengo duda de que este sería una de esas maravillas no en vano es Patrimonio de la Humanidad.

Bueno, realmente este rincón no es que sea muy secreto, este es de los que sale primero en las guias, es la atracción turistica de Irlanda del Norte, pero no por eso es menos espectacular. Os aseguro que vale la pena visitarlo, y si podeis escoger, es muy recomendable ir en verano, ya que en invierno no es lo mas fácil dar con un dia de buen tiempo en Irlanda del norte, y en la calzada del Gigante suele hacer un viento muy frio que no te deja disfrutar de la belleza del lugar como es debido.
Yo estuve un par de veces en febrero, y no hace falta decir que me encantaria volver.
Ademas si se tiene la suerte de tener buen tiempo, hay unos senderos que se pueden recorrer a pie, con unas vistas para caerse de espaldas.

La manera de llegar a ciertos lugares tan distantes, siempre empieza por una casualidad. Esto es muy evidente en esta excursión.
En una clase de lengua de Primaria leímos la leyenda de dos gigantes bravucones, separados por el océano, que se lanzaban piedras desde sus moradas, tantas que crearon un puente de piedras, la calzada de los gigantes. Resultaron no ser tan valientes porque el más pequeño al ver acercarse a su oponente, despavorido pidió ayuda a su inteligente esposa, verdadera héroe del cuento, quien le hizo esconderse en un cesto y lo tapó como si fuera un bebé. Cuando llegó el grandullón a su casa, la ingeniosa gigantona le ofreció té y le pidió que esperara a su marido que no se encontraba en el hogar. Mientras esperaba, se asomó al cesto y al ver al tan crecido vástago, salió como alma que lleva el diablo imaginándose como sería el padre de la criatura y rompiendo la calzada para no ser seguido. Dicho destrozo es la supuesta causa de que Irlanda y Escocia no estén unidas.

La Calzada del Gigante está envuelta en el mito y la leyenda. Se dice que fue excavada en la roca por el poderoso gigante Finn McCool como un camino formado por cuarenta mil columnas de basalto para pasar de Irlanda a Escocia sin mojarse los pies.

Al parecer el irlandés tenía un rival en esa tierra llamado Benandonner al que nunca había conocido. Para demostrar a todo el mundo que él era el más fuerte, Finn desafió al escocés a que fuera al Ulster a batirse en duelo, como el otro gigante rechazara cruazar a nado la distancia entre las dos tierras, el irlandés construyó la calzada en una sola noche.