Una pizca de Pirineo Atlántico en estado puro
A escasos 30 minutos de la parte de la parte nororiental de Navarra, ya en el teritorio vascofrancés de Zuberoa (muy cerquita de donde Induráin se vino abajo en el que podía haber sido su 6º Tour) se puede realizar esa excursión ideal que todos tenemos en mente para ese día que nos pide el cuerpo huir del achicharrante asfalto veraniego y recibir una sobredosis de oxígeno y frescura. Sí... ese sitio existe, y he estado ahí!
Se trata de una travesía circular partiendo del albergue de Logibar (el punto marcado en el mapa), apta para todos los públicos con un mínimo de forma: mi mujer la hizo embarazada de 6 meses, en varias horas pero sin problemas. La recomiendo especialmente en un día despejado para disfrutar al máximo de las vistas, ya que aquí encontraréis extensiones de verde inacabables (algún rincón parecía un exterior de "Perdidos"), riachuelos y cascaditas, aire purísimo, vistas grandiosas durante todo el recorrido, y por supuesto el plato fuerte: la propia pasarela construida en 1.920, nada menos que 100 metros de caída en plena garganta. Sólida y segurísima, todo hormigón y metal, pero los que sufran de vértigo probablemente desearán cruzar rápido... para los demás, totalmente hipnótico, no podía dejar de mirar embobado!
