Cork, una ciudad muy amable
Han sido solo cuatro días, pero hemos estado muy a gusto en este B and B de Cork.
Las habitaciones sencillas pero bien. El personal muy, muy amable.
Los desayunos impresionantes, además nos ha permitido probar especialidades irlandesas.
El bizcocho, los moufins,el pan, hasta el porridge.
La única pega la cuesta que hay que subir desde el centro de Cork, después de visitar sus pubs: otro aliciente de esta ciudad que nos ha parecido muy agradable, nada turística pero con un ambiente en cada pub, donde te encuentras todo tipo de música.
Eso sí tuvimos buen tiempo, nada del que