Grutas naturales
El conjunto está formado por unas grutas naturales sobre las que se construyó un edificio dedicado a uso religioso. Algunas salas son las de los Heros, la capilla rupestre dedicado a San Miguel. La iglesia es de planta central octogonal.
Cuenta la tradición que en el s. VI el noble soriano Saturio repartió sus riquezas entre los pobres y marchó a vivir a unas cuevas junto al Duero. Su recuerdo se perdió y, en el último cuarto del s. XVI, se encontraron sus restos y creció la devoción hacia el eremitaño hasta el punto de construir un templo en su honor y nombrarlo patrón de la ciudad.