Passeio de buggy

"Muita emoçao" es sin duda la frase en portugués que define a las dunas de Genipabú. Visita obligada para los turistas en Natal. A las 5.00h los primeros rayos de sol abrasan y empiezan a ponerse en marcha
brasileños haciendo jogging por las playas casi desiertas. Es aconsejable madrugar si vas hacer el trayecto en buggy por la playa, porque al atardecer sube la marea y hay que ir a toda leche con el buggy para no quedarte tirado.

En las Dunas la sensación de vértigo y velocidad es bestial, y por consiguiente podéis pedir el conductor que os lleve a la laguna, dónde podéis lanzaros al agua desde una tirolina y más tarde comer un delicioso pescado.

Playa súper tranquila, paseos a caballo, quad, parking al ladito de la playa, servicio de bebidas y comidas en la misma arena, no se necesita llevar nada, por menos de 5 € tienes mesa y sombrilla pata todo el día.

Terminé llena de moratones porque el vehículo no estaba bien preparado y aunque el almuerzo no estaba incluido te dejan en un lugar sin opciones porque tenían un arreglo con el restaurante.

Si vas a Natal, no podes dejar de hacer la excursión en buggy a las dunas. Las playas y los lugares q recorres son distintos a todos. Imperdible, me encantaria volver a hacerla.

Emocionante! Si te gusta el riesgo y la velocidad!

Excursión recomendable para hacer, vistas increíble y el círculo muy bueno