Buena música y Rafael
Un enorme taquillón da la bienvenida al Drink Club, uno de los garitos del Río de la Pila. Decorado a modo de taberna, en este agradable bar abierto hasta la madrugada podrás disfrutar de un zumo natural, un refresco o un copazo de pie, en la barra o tranquilamente sentado en una mesa. Aunque para que nos vamos a engañar, aquí lo que pega es hacerse con una cerveza (desde tres euros) o un buen kalimotxo (precio similar. Si quieres por unos céntimos más le añaden algún licor).
La decoración es acogedora. Hay una gramola vieja (si estás al fondo del bar la verás justo antes de la barra, arriba a la derecha), un piano antiguo, bancos de madera, chapas inscritas y colgadas de la pared... Y para ir al baño atraviesas unas puertas que ya hubiera querido el Sheriff del lejano oeste.