Estuvimos en esta maravilla en Junio de...
Estuvimos en esta maravilla en Junio de 2008, y superó todas nuestras expectativas.
Es un Cortijo antiguo, reformado y rehabilitado, con una tradición y una solera que rezuma tiempos pasados, pero con todas las comodidades que uno pueda necesitar.
La arquitectura es típica andaluza, con paredes blanqueadas, limoneros, naranjos, buganvillas y unos patios que hacen que estés verdaderamente a gusto.
Tiene una piscina, completamente independiente, en medio de un olivar precioso, en un entorno inigualable. La tranquilidad está asegurada en un lugar como este.
Las habitaciones amplísimas y decoradas con muchísimo gusto, muebles de distintas partes del mundo, preciosas alfombras, camas de hierro forjado muy románticas... Hay algunas habitaciones que tienen dos alturas.