GERARD DECQ
Alejados de la multitud
Me pregunto si, empujados por la cantidad de gente, muchas personas no se irán del Mont Saint Michel sin visitar las murallas. De hecho, en cuanto se llega, uno es atrapado por la calle ascendiente, llena de tiendas, restaurantes e incluso los "sitios históricos" con entrada conjunta. Y muy a menudo, descendemos por la misma calle después de haber realizado la visita de la abadía. Paralelamente a esta calle principal, hay al menos otros dos itinerarios que conducen a la abadía. El camino que rodea las murallas es, en mi opinión, el más interesante. Ciertamente, usted no estará solo; tampoco hay que soñar ;-), pero la multitud no se concentra aquí, a diferencia de la calle de abajo.
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