Castillo de Kilkenny

Estratégicamente situado en uno de los cruces del río Nore, el castillo de Kilkenny domina desde su pequeña atalaya casi la totalidad de la ciudad de San Canice.

No es muy antiguo, apenas ocho siglos tiene de historia, pero ha sido restaurado, modificado, ampliado y embellecido hasta conseguir la actual complejidad estructural que integra varios estilos arquitectónicos en sus seis pisos de altura.

Así, y siguiendo un orden cronológico y de visita, en el sótano encontramos los cimientos de aquel primer castillo medieval, con saeteras para la defensa de campo y pasillos interminables, mazmorras y laberínticos pasadizos. Un piso más arriba encontramos las primeras salas nobles, como la preciosa habitación chinesca, la gran escalera de acceso, el comedor principal o la sala de tapices, que recuerda a los palacios españoles.

En nuestro fin de semana de escapada a Kilkenny no podíamos terminar sin ver el famoso castillo de Kilkenny. Se encuentra sobre un cruce del río Nore y domina la parte alta de la ciudad de Kilkenny.
Gracias a que le echamos un poco de cara pudimos hacer el tour guiado por precio de estudiante, ya que en la mayoría de visitas piden un carnet que no teníamos. Según entras puedes ver la parte de atrás del castillo hacia la derecha y una fuente a la izquierda. Rodeando el castillo por la derecha llegas a lo que es la entrada del castillo y a un inmenso parque, donde la gente va a comer, a tirarse por las laderas rodando, a jugar al fútbol y a muchas otras actividades y deportes. También había un parquecito con columpios para los más pequeños.

Sobre el río Nore, rodeado de fantásticos jardines, y cerca del centro de la ciudad, teneis este castillo que perteneció a la familia Butler, y que fué vendido por 50 libras a mediados del siglo XX al comité local de restauración, ahora pertenece al estado, y previo pago podeis disfrutar de parte de la colección nacional de arte que allí se expone. Desde el 2002, se celebran allí las pomposas ceremonias de graduación de la universidad.

Castillo medieval por escelencia en Irlanda situado en el cruce del río Nore. Con 800 años de historia, ha sufrido numerosas añadiduras y modificaciones. Sus principales moradores, la familia Butler, sirvieron a los reyes de Inglaterra.