Fue alrededor del año 100 que los ...
Fue alrededor del año 100 que los romanos construyeron las primeras murallas de lo que con el tiempo sería la espléndida ciudad fortificada Carcassonne. Páginas se podrían escribir sobre los ejércitos que la asolaron hasta el fin de la Edad Media, sin embargo, fue en 1849 que la ciudadela corrió verdaderos riesgos de desaparecer: Dado su deterioro, el estado francés consideró seriamente demolerla. Gracias a que artistas e intelectuales se opusieron, Carcassonne recuperó su magnificencia.
Es cierto que la ciudadela es masivo polo turístico, es verdad que a ciertas horas uno puede toparse con multitudes que marean hasta lo indecible; Carcassonne, aún así, sigue siendo absolutamente mágica y romántica. Es irremediable, la visión de sus torres desde el Puente Viejo provoca una muda exclamación. Luego, al otro lado de su doble muralla, el mundo parece de juguete, casi como si uno recorriera un fantástico decorado puesto allí para soñar. Pero todo es cierto y verdadero, cada piedra, los techos empinados de pizarra, las cincuenta y tres torres, el magnífico castillo condal, la antiquísima catedral de Saint-Nazaire.