Quedamos en Sol, salimos de fiesta por...
Quedamos en Sol, salimos de fiesta por Sol, nos tomamos un cafetito cerca de Sol, salimos de compras a Sol y siempre allí, el tío Pepe, casi el único cartel que salvó su neón de la hoguera que borró toda marca lumínica y gaseosa de las calles céntricas de Madrid.
Y lo que le gusta a los guiris Sol, el vino y la guitarra. En un cartel se condensa la fascinación del estudiante extranjero que pasa por la capital española. "Sol de Andalucía embotellado", reza la publicidad y me hace gracia, porque a mí lo que me parece es que el cartel lleva muchas horas de sol de Madrid a las espaldas.
Por debajo, obras, más obras, algún mimo, alguien que pide, otro que saca una cartera de un bolso que no es el suyo, el autobús para donar sangre, dos turistas que se sientan cansados en la fuente, alguien siempre haciendo una foto al oso.