Capilla de Pépiole

A la capilla de Pépiole se puede llegar en coche, y tiene un aparcamiento a la entrada. Esta pequeña capilla está ubicada en un marco idílico, entre olivos, viñas y cipreses. La construcción data del siglo V o VI, siendo incierta la fecha exacta. Es de estilo prerrománico, y ha sido objeto de restauración en varias ocasiones. Su arquitectura es muy particular, pues está compuesta por 3 naves y 3 ábsides. Otra de las particularidades arquitectónicas que presenta son las vidrieras, hechas a partir de botellas de cristal: la luz traspasa la botella, dando un efecto colorista. El interior de la capilla es bastante sencillo, y por ello provoca un profundo sentimiento de quietud.