Campamento Casa de Campo
La de las hermanas Valenzuela no es una historia distinta a las del resto de quienes se han metido en este mundo de los campamentos. Para ellas era un sueño familiar: Lucía, Andreina y Claudia tomaron unos terrenos de sus padres y los acondicionaron para en ellos recibir cada año a sus niños. Cada uno de estos jovencitos que llegan a Casa de Campo, se convierten en hermanos, primos, sobrinos y hasta hijos de estas hermanas que apostaron su esfuerzo a esta empresa que según dicen les ha traído las mayores satisfacciones de su vida, así como el hecho de mantenerlas unidas.
Esta hacienda es realmente una fascinación de la zona de Yumare en el estado Yaracuy. Con ese verde que ofrece el estado, con esa humedad que provoca su clima; allí desde 1999 los niños hacen su alboroto cada año para disfrutar de los alrededores y sus instalaciones.