Maravilloso primer plato
La Calleja del Postigo es uno de los lugares de acceso a la ciudad desde la zona baja. Después de subir la interminable escalinata que se encuentra junto al túnel ,se accede a esta corta y fascinante calle donde ya empezamos a disfrutar del color, de la arquitectura y de la placidez de Albarracín. Un maravilloso primer plato del menú arquitectónico que nos tiene preparado esta ciudad.
En lugares así, solo te queda abrir bien los ojos y dejarte sorprender por cualquier detalle a la vez que caminas como hipnotizado por el color rosa anaranjado de las fachadas. De repente, da igual el calor, el cansancio de las interminables escaleras, tu cuerpo te empieza a pedir más y más.