Cadillacs enterrados convertidos en icono
Parada imprescindible en la ruta 66 en Estados Unidos: al lado de la autopista a su paso por Amarillo (Texas), se encuentra una curiosa visita: diez cadillacs semienterrados y repletos de pintura grafiti. Se trata de una iniciativa de un grupo artístico en los años 70 reconvertido en lugar de peregrinaje para turistas, que, además, pueden participar en la "obra". Alrededor de los coches es fácil encontrar botes de spray y poder añadir tu nota particular a los coches. Será el momento friki de vuestros viajes, pero siempre os arrepentiréis si no hacéis una parada de cinco minutos allí.