Javier Alegría Rodríguez
Las vistas preciosas, pero muy mal producto
Decir que el sitio son dos locales en uno, por un lado la heladería y por otro el bar/restaurante. Animados por las vistas y por unos precios aceptables para estar al lado del castillo, nos sentamos en la terraza para tomar unas cervezas y un par de raciones.
Pedimos unos calamares y unas puntillitas y sencillamente nefasto. Ambos dos congelados. Sobre todo los calamares eran los tipicos anillos de calamar congelados, que desde luego no te los esperas en un sitio al lado del mar.
No opino de los helados porque no los vi. Pero viendo la calidad del producto para echar una cerveza perfecto, porque ya digo que las vistas son inmejorables desde la terraza.
Leer más