Bodega de Pantaleón

Todo pueblo pequeño tiene su bodega y este no puede ser la excepción. Es impresionante como en pleno siglo XXI aún se ven estas tradiciones tan bonitas. Y es que cuenta su dueño Javier Segura que el negocio lo comenzó su abuela cuando le dieron una compensación por haber movido su casa de lugar para hacer las vías del ferrocarril. Y desde ese momento se les ocurrió vender caraotas en jarra. Pues si, este plato que es tan venezolano y representa una muy buena proteína pues se vende aquí por potecitos listo para almorzar. También venden arepitas rellenas y torticas de plátano y por supuesto todo