Eszeweria

En mi opinión el bar más bello de la ciudad, nunca estuve en un ambiente así. En el corazón del barrio judío (Kazimierz) está abierto desde la mañana hasta la noche.
No sirven casi nada para comer, solo la tarta hecha en casa, pues en realidad es un lugar para beber y charlar.
Hay sofás y diversidad de sillas , parece que estás en una antigua casa de campesinos de los años 40. Es difícil describirla con palabras, es mejor verla en fotos.
Si vas a tomar algo, no te levantarás de allí en un par de horas ... y la amabilidad del personal es digna de mención. Muy bonito también, el jardín interior pequeño.