albertoloyo
Bar alternativo con un dueño muy original
Viajar sin prisas es todo un lujo y poder disfrutar de una cerveza tranquilamente con el propietario de este bar fue todo un placer.
Ajeno al ajetreo del día a día que todos sufrimos, abría el bar cuando le venía bien, sin prisa te ponía el café, si pedías algo que él no tuviera, se iba al bar de al lado... Para mí, ejemplo de lo que es vivir sin presión y disfrutando del día a día.
Interesante la oferta de clase de salsa y café por un libro.
+5