Torremolinos me sorprendió
Torremolinos me sorprendió. Tranquilad, excelente clima y en general ambiente relajado y familiar. Calidad precio perfecto. Aunque algunas de las instalaciones te recuerden a la niñez, las vistas, la piscina, el servicio el restaurante y la amplitud de las habitaciones te conquistaran. Sin pretensiones, ambiente europeo, relax frente al mar y sobre el paseo marítimo (chiringuitos, tiendas y restaurantes). Si vuelvo a Torremolinos, aquí me alojaré.