Un trasto endeble de lo que parece
Solo hay dos vías de acceso a Rivera Brava: por mar o por ascensor de la muerte. Esta segunda opción es la que tomé yo y, desde luego, fue toda una aventurilla. Aunque a primera vista no inspira precisamente confianza, este ascensor es la forma más común de llegar hasta este bonito enclave de Madeira, ya sea para darse un baño en el Atántico o para ir a tomar algo al restaurante Faja dos Padres.
Podrás subir y bajar en el ascensor de Rivera Brava de 11:00 horas a 18:00 por el precio de 7,50 euros. Durante el viaje disfrutarás de una vista marítima impresionante aunque quizá no del gusto de gente con vertigo.