Cantidad y calidad
Llegamos a Sanxenxo buscando un poco de carne para descansar de varios días de marisco y en este asador dimos en el clavo. Para comenzar, pedimos un pulpo a la brasa..te lo sirven en una bandeja caliente con carbón debajo, por lo que continua cocinándose en tu propia mesa: sabor espectacular y textura tierna. El plato fuerte: parrillada de carne para 2, compuesta por pollo deshuesado, solomillo ternera, salchicha casera. Pincho moruno, costillar de cerdo, y cordero, aunque se suponía que era para 2 y contando con que mi pareja y yo tenemos buen saque..nos dejamos poco menos de la mitad. Lo interesante es que en el comedor tienen el horno con las brasas y ves como realizan la comida, aunque esta bastante alejado y no notas el calor. Los postres muy buenos, yo pedí una especie de crepes con chocolate negro y almendras..riquísimos, y mi pareja tomo unas ciruelas en Oporto, que según nos comentò el camarero eran producto típico de la zona. El trato y ambiente correcto.