Amanecer en Shwesandaw Paya
Bagán es un lugar mágico. Plagado de pagodas, uno queda omnubilado cuando recorre esos campos llenos de templos y Budas. Uno de los momentos más especiales para percibir el ambiente del lugar es al amanecer. Toda la zona se suele llenar de una bruma que sólo deja ver la parte más alta de las pagodas, dependiendo del día. Ver aparecer el sol, iluminando poco a poco los cientos de templos es una sensación única.
Nosotros llegamos directamente desde Yangón, en un viaje infernal nocturno y nos fuimos directamente a la pagoda Shwesandaw. Subimos hasta arriba y esperamos hasta que el sol salió. No fue el mejor amanecer que hemos visto, pero sí que fue muy bonito ver por vez primera un paisaje que hasta ese momento no lo habíamos visto más que en fotografías. De un entorno oscuro y desconocido, poco a poco fue aclarando el día y empezamos a darnos cuenta de dónde estábamos.