Marilo Marb
Un hotel de carretera
Aunque solo fue una parada camino de Bikaner, me llamó la atención por lo cuidado y limpio que estaba todo y los precios, unos precios muy ajustado para mochileros o bolsillos de bajo presupuesto.
Hay un jardín pequeño, pero muy agradable para comer o descansar, y aunque en un principio solo estábamos el conductor y nosotras dos, en media hora llegaron un par de microbuses de una agencia de viaje francesa, por lo que dedujimos que era una parada para "guiris".
El café es aceptable si te gusta al estilo "pucherete", si no es así te recomiendo mejor el chai masala que si estaba delicioso.
+4