Monumento a los Niños Héroes

En el Segundo día en la Ciudad de México. El día estaba muy nublado, pero aún así se fue temprano del hostal con gran disposición para aprovechar todo el día. El primer destino sería el Monumento a los Niños Héroes. El monumento fue inaugurado en el año 1952 en honor a un grupo de cadetes mexicanos que murieron en la Batalla de Chapultepec, durante la guerra entre Estados Unidos y México en el año 1847. El principal punto de entrada del Bosque de Chapultepec (en el mismo sitio, se encuentra varios otros lugares importantes de la ciudad, como el Museo Nacional de Antropología, el Castillo de Chapultepec, el Museo de Arte Moderno, Paseo de la Reforma (la avenida principal y el centro económico de la ciudad), además de un magnífico bosque lleno de muchos árboles y estanques y debe reservar al menos un día para visitar esta zona).

Los Niños Héroes son uno de los personajes más venerados de la historia mexicana. Según dice la historia oficial estos seis cadetes defendieron el Castillo de Chapultepec, allí funcionaba el Colegio Militar, cuando Estados Unidos le declaró la guerra a México en 1846.
En septiembre de 1847 la invasión estadounidense fue un hecho, y estos cinco cadetes: Juan Escutia, Vicente Suárez, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, Agustín Melgar y el teniente Juan de la Barrera, defendieron con valentía a su patria.

Igualmente otras versiones dicen que hay mucho mito y leyenda y que por ejemplo, Juan Escutia, el cadete que supuestamente tras la invasión al Colegio Militar se tiró al vacío envuelto en una bandera de México para que ésta no cayera en manos de los gringos, es un hecho que nunca existió.

Todas las avenidas mexicanas cuentan con maravillosas obras de arte, en todas ves grandes monumentos.