Hay muchos puntos de interés que visitar en Grenoble, la mayoría influencia de su gran historia a lo largo de los años. Lo primero que podemos ver son las numerosas iglesias y basílicas que hay en Grenoble. La Catedral de Notre Dame o la Iglesia de Saint André son algunos ejemplos. Esta última, es una de las más bonitas del casco antiguo. La Basílica de Sacré Coeur es otra de las cosas que ver en Grenoble, cuya fachada destaca por su estilo ecléctico, con llamativos elementos que aluden a la arquitectura clásica. Merece la pena ver su gran arco de la entrada principal flanqueado por columnas, el techo en forma piramidal o las dos torres del exterior.
La Bastilla es uno de los sitios que ver en Grenoble con mayor historia. Se trata de una fortaleza del siglo XIX, situada en una colina a la que se puede llegar en el teleférico que parte del casco antiguo de la ciudad. El paisaje desde allí es inmejorable. Imprescindible es también el Museo de Grenoble que contiene una de las colecciones pictóricas que ver en Grenoble más importantes de toda Francia. Zurbarán, Rubens, Picasso o Modigliani se presentan con algunas de sus obras magistrales.
Por último, la Plaza Grenette y calles del centro histórico son lugares que ver en Grenoble muy particulares. Son el lugar perfecto para pasear, comprar o tomar un café.