Explorando los valles escondidos de Cantabria y su belleza singular
Cantabria guarda en sus valles escondidos una riqueza natural impresionante y un legado cultural único. Lugares como el valle de Liébana, rodeado de montañas, ofrecen vistas espectaculares y la oportunidad de disfrutar de acebo y bosques de robles. El valle de Soba, con sus prados verdes y ríos cristalinos, es ideal para los amantes del senderismo. En estas zonas, es posible descubrir tradiciones ancestrales, gastrónomos regionales y experiencias auténticas que conectan al visitante con la naturaleza y sus habitantes.
Valle de Iguña, por alejandro garcía
San Roque de Riomiera, por Agustin Valentin-Gamazo Villar
El valle de Cabuérniga, por Lala
Valle de Soba, por JOSE ANGEL BUSTO
Valle de Campoo, por Sergio Marcos
Valle de Polaciones: Cantabria encantada, por Silvia Movellán Viaña
Comarca del Alto Asón, por SerViajera
Tornos de Liordes, por Sócrates Maestre Escobar
Valle de Áliva, por Víctor Gómez - machbel
Valle de Liébana, por sin_retoques
Los valles de Cantabria se presentan como auténticos paraísos naturales que invitan a la exploración y al descubrimiento. Desde la serenidad del valle de Polaciones hasta las majestuosas vistas del valle de Liébana, cada área encierra un segmento de la riqueza paisajística de la región. La diversidad de sus locaciones, como el valle de Cabuérniga y la comarca del Alto Asón, ofrece un refugio perfecto para aquellos que buscan conectar con la naturaleza en su estado más puro.