Castillos menos conocidos de Portugal que esconden tesoros históricos Portugal alberga castillos menos conocidos que revelan sorprendentes tesoros históricos. El Castillo de Almourol , situado en una isla del río Tajo, es una joya medieval con leyendas templarias. Otro ejemplo es el Castillo de Óbidos , que destaca por su murallas bien conservadas y su impresionante historia que se remonta a la época de los reyes. El Castelo de Penedono, con su arquitectura única, también ofrece un rico recorrido por la historia de la región y su pasado medieval. Estos castillos, aunque menos visitados, ofrecen una experiencia auténtica y enriquecedora para los amantes de la historia y la arquitectura.
Castillo de San Jorge, por Jessica Martinez Infante
El Castillo de San Jorge , uno de los principales atractivos turísticos de Lisboa , se sitúa en la colina más alta de la ciudad, ofreciéndonos unas vistas impresionantes sobre Lisboa y el río Tajo. La viajera lucrecia bertrand destacó que el castillo, conocido antiguamente como Castelo de Mouros, es un lugar "imgresionante y muy bien conservado", donde se puede pasear por las almenas y sentirse transportado a otra época. Además, su rica historia se remonta al siglo V, habiendo sido ocupado por reyes portugueses entre los siglos XII y XVI.
Los visitantes también alaban el ambiente único del recinto , que incluye jardines y patios, donde la fauna, como pavos reales, complementa la experiencia. Almudena mencionó que el castillo, con sus ruinas en excelente estado , abarca aproximadamente 6000 m², lo que permite disfrutar de un agradable paseo. Por su parte, el viajero macmuseo disfrutó de un concierto informal mientras exploraba el lugar, añadiendo un toque especial a su visita. La entrada tiene un costo accesible y, a pesar de que algunos usuarios sugieren evitar el tranvía por su congestión, el paseo a pie desde la plaza del Comercio es muy recomendable. El Castillo de San Jorge es, sin duda, una visita obligada para quienes deseen descubrir el encanto histórico de Lisboa.
Castelo dos Mouros, por Anne Moroko
El Castelo dos Mouros, ubicado en la encantadora villa de Sintra, es una fortaleza que evoca la historia medieval de Portugal, construida en el siglo IX durante las invasiones musulmanas. Desde su posición privilegiada en un macizo rocoso, ofrece vistas impresionantes del Palacio da Pena y del hermoso Océano Atlántico. Un viajero describe el lugar como "una enorme fortaleza medio en ruinas, muy bien conservada", destacando que "desde él se pueden apreciar las mejores vistas de Sintra".
Para llegar al castillo, se puede optar por un recorrido a pie de aproximadamente 3 km por una carretera empinada, o utilizar un autobús que conecta el centro de Sintra con el castillo y el Palacio da Pena. Una vez dentro, los visitantes pueden explorar sus 450 metros de murallas y cinco torres, incluida la Torre Real, que se alza a 500 peldaños sobre el nivel del suelo. Un viajero recomienda "no tener prisas, preparar la cámara y disfrutar de cada piedra y rayo de sol".
El Castelo dos Mouros no solo ofrece hermosas vistas y un entorno natural impresionante, sino también un profundo sentido de historia, situado en un parque declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO . La vegetación que ha invadido cada rincón del castillo añade un toque auténtico, haciendo que "parezca que en breve va a salir un soldado medieval en alguna de las torres", lo que enriquece aún más la experiencia de los visitantes . Sin duda, este castillo es un lugar que merece ser explorado y apreciado.
Castillo de Obidos, por Mr. Camarena
El Castillo de Óbidos , una impresionante fortificación situada en el corazón de una villa amurallada, es un destino que fascina a los visitantes por su historia y encanto. Este monumento nacional, declarado en julio de 2007, se alza sobre un montículo que ofrece vistas espectaculares de la llanura circundante, un detalle resaltado por Sasa72 , quien destaca que "el castillo se encuentra en un lugar impresionante".
Los viajeros como Alejandro Cabello Muñoz destacan su "perfecto estado de conservación ", lo que permite recorrerlo a través de sus murallas y disfrutar de las diversas calles y plazas que lo rodean. Recomienda visitar el castillo durante la época navideña, cuando el ambiente se anima con mercadillos que recuerdan a los deCentroeuropa. Además, la experiencia de Mr. Camarena resalta el encanto del pueblo y su rica historia, aunque también señala que las opciones gastronómicas pueden ser limitadas en la zona.
Yasmina Irene Fernández también comparte su asombro por el recinto medieval , destacando su singularidad. Para aquellos que buscan relajarse, Mariana Pequeno sugiere disfrutar de un buen vino mientras se contempla el hermoso paisaje que rodea al castillo. Sin duda, el Castillo de Óbidos es un lugar que encanta y deja huella en quienes lo visitan.
Castillo de Guimarães, por Lala
El Castillo de Guimarães , ubicado en las afueras del casco histórico, es una joya arquitectónica que cautiva a todos los visitantes. Situado en el Monte Latito , conocido como la "colina sagrada", este monumento nacional fue construido en el siglo X por la Condesa Mumadona Dias para proteger el monasterio que había fundado. Su historia es rica y fascinante, ya que en sus muros se libró la batalla de S. Mamede , considerada un hito en la formación de Portugal como nación.
"El castillo es impresionante, aunque por dentro no hay nada que ver", comenta una viajera, destacando su función más simbólica que funcional en la actualidad. A pesar de ello, "muy bien restaurado y muy interesante", añade otra viajera, lo que demuestra el esfuerzo por conservar su legado histórico. La estructura presenta siete torres cuadradas con almenas, siendo la Torre del Homenaje , de 28 metros, uno de los grandes atractivos, ya que se puede acceder a su cima y disfrutar de vistas panorámicas del entorno.
Además, al pie del castillo se encuentra la Capilla de San Miguel y el Palacio de los Duques de Bragança , lo que lo convierte en un punto ideal para explorar la historia de Guimarães. Este encantador pueblo es considerado el inicio de lo que hoy conocemos como Portugal, ofreciendo una experiencia cautivadora tanto de día como de noche. Sin duda, una visita que no debe faltar en el itinerario de quienes buscan adentrarse en la rica herencia cultural del país.
Castelo, por Marta Pilar
El Castelo de Tavira , situado en el centro de esta encantadora ciudad del Algarve , es un lugar imprescindible para los visitantes. Su historia se remonta al siglo XII, cuando fue erigido durante la ocupación islámica. Con el tiempo, fue reconquistado y ampliado por los cristianos, siendo modernizado en el siglo XVII. Aunque hoy en día queda poco de la estructura original, lo que se conserva envuelve un hermoso jardín que invita a la tranquilidad.
Una viajera destaca que "aunque es pequeño y se ve rápido, tiene mucho encanto" y asegura que "puedes subir a la parte alta de sus murallas y disfrutar de unas maravillosas vistas del puerto y la ciudad". Desde estas alturas, se aprecia un espectáculo visual que incluye el mar de tejados que se extiende hasta el río Gilão y las torres de las iglesias blancas. Un viajero comenta que "el castillo es uno de los lugares más elevados de la ciudad, para disfrutar de las mejores vistas" y menciona la posibilidad de refrescarse con una limonada a su entrada por solo un euro.
Este sitio combina historia, belleza natural y una atmósfera relajante que lo convierte en un destino encantador en Tavira .
Fuerte de San Felipe, por Maria
El Fuerte de San Felipe , conocido también como el convento capuchino, se erige imponente sobre Setúbal y el río Sado, marcando el paisaje con su historia y su belleza. Este castillo, construido en el siglo XVI por orden de Felipe II de España, fue diseñado por el arquitecto italiano Filipo Terzi y sirvió como fortificación defensiva. Hoy en día, es un destino turístico que permite a los visitantes disfrutar de sus espectaculares vistas.
Maria destaca la increíble panorámica que se puede disfrutar desde sus murallas, mencionando que “el paisaje desde el muro es impresionante, la visión desde lo alto te permite captar perfectamente la dimensión del entorno.” La combinación de la ciudad, la Sierra da Rábida y la península de Troia entrelaza un cuadro natural que deja sin aliento.
Ramon Bravo Aliseda también se suma a las alabanzas, indicando que “lo mejor, sin duda, son sus vistas sobre Setúbal, la Sierra da Arrábida, Troia y el estuario del Sado.” La magia del Fuerte de San Felipe radica no solo en su historia, sino en la conexión que ofrece con el entorno natural, garantizando una experiencia inolvidable para quienes lo visitan. Sin duda, es un lugar que merece ser explorado.
Castelo, por Lala
El Castelo de Faro es un lugar que atrae a los visitantes por su rica historia y su entorno apacible . Aunque solo quedan ruinas de esta fortaleza, su legado es impresionante. Según Marta Pilar , "los vestigios que aún quedan del Castelo de Paderne, edificado por los moros en el siglo XII, son testimonio de su importancia a lo largo de los siglos ". A pesar de que se conservan en mal estado, se pueden apreciar fragmentos de las murallas y una torre que evocan el esplendor de épocas pasadas.
Los viajeros destacan también lo cuidado y bonito que es el sitio, convirtiéndolo en una parada imprescindible durante las vacaciones. Laura Costas menciona que es "una visita imprescindible para las vacaciones ", resaltando así el atractivo que el castillo tiene para quienes buscan experiencias culturales . La sensación de paz en el entorno es otra de las características valoradas por los visitantes, como señala Juan Oliva Toledo , quien describe el lugar como "un entorno apacible" donde se puede disfrutar de la historia en un ambiente sereno. Sin duda, el Castelo de Faro es un tesoro que enamora a todos los que lo visitan.
Chaves Castle and Military Museum, por Lala
El Castillo de Chaves y el Museo Militar son dos joyas situadas en la Ciudad Alta de Chaves, en pleno corazón de su casco histórico. Los viajeros destacan la belleza de esta fortificación, mencionando que las vistas panorámicas que ofrece sobre la ciudad son "magníficas". La torre del castillo, bien conservada y rodeada de hermosos jardines, invita a pasear por sus murallas y perderse en la historia de la fortaleza, que fue construida por orden del rey portugués en el siglo XIV y está clasificada como Monumento Nacional .
Los visitantes aprecian la diversidad de su interior , donde se encuentra el Museo Militar. Aquí se exhiben “combinaciones militares, uniformes, banderas y armas” que datan desde la Edad Media, permitiendo a los interesados conocer las técnicas de defensa utilizadas durante los ataques de los españoles. Aunque algunos viajeros mencionan que su visita se vio afectada porque “todo estaba cerrado” al ir un domingo, otros resaltan que el lugar es "precioso" y definitivamente merece la pena visitar. Chaves ofrece una experiencia rica en historia y encanto que enamora a todo aquel que se acerque.
Fortaleza o Forte Ponta da Bandeira, por meninha
La Fortaleza Ponta da Bandeira se alza majestuosa en la desembocadura del río Bensafrim, en Lagos, Portugal. Este emblemático fuerte, también conocido como Forte de Nossa Senhora da Penha de França , fue construido en el siglo XVII y está declarado Inmueble de Interés Público . “Es una edificación militar del siglo XVII, concebida como una de las fortalezas más avanzadas técnicamente de todo el Algarve", señala un viajero. Su planta cuadrangular está defendida por gruesos muros y cuatro garitas cilíndricas que ofrecen a los visitantes vistas impresionantes del océano Atlántico .
El interior alberga una pequeña capilla dedicada a Santa Bárbara , decorada con azulejos del siglo XVII, que impacta a quienes la visitan. A pesar de que el viajero CurroMolina menciona que “el interior de sus salas” podría decepcionar, destaca la capilla y una maqueta del barco Sagres. La fortaleza no solo es un sitio histórico, sino que también acoge exposiciones temporales sobre las exploraciones portuguesas , lo que añade un atractivo cultural significativo. Según meninha , “merece la pena visitar el interior que alberga la capilla de Santa Bárbara”. Desde sus miradores cercanos, los aficionados a la fotografía pueden capturar su belleza, convirtiendo la visita en una experiencia inolvidable.
Castillo de Silves, por Sasa72
El Castillo de Silves , una fortaleza de origen árabe , se erige majestuosamente sobre la ciudad, destacando su imponente silueta en lo alto de una colina. Los viajeros se sienten atraídos por su gran historia, ya que “el castillo domina la ciudad” y su estructura ha sido testigo de la ocupación visigoda y árabe antes de ser conquistado por los cristianos. Las murallas de piedra de color rojizo, que forman un polígono irregular, incluyen cuatro torres: la del Centro, la de las Mujeres, la torre de Homenaje y la del Secreto.
Al acceder al castillo, los visitantes pueden explorar vestigios de la cultura musulmana, como una impresionante cisterna árabe, lo que lo convierte en un lugar de gran interés histórico. Un viajero comenta que el castillo y su entorno son “muy interesantes” y destaca la experiencia de visitar durante una feria medieval. Desde el paseo de ronda, las vistas panorámicas son simplemente espectaculares, proporcionan una conexión mágica con el pasado de Silves. Considerado un “magnífico castillo”, es un destino que permite conocer la fascinante historia del Algarve , todo a un precio accesible.
Castillo de Marvao, por Milla
El Castillo de Marvão , ubicado en la cima de una montaña en el Parque Natural de la Sierra de São Mamede, es un destino que enamora a los viajeros con su impresionante vistas y su historia fascinante . WillyFog comparte: "Desde Marvão, como está en lo alto, se puede divisar Castelo de Vide", lo que resalta su ubicación estratégica cerca de la frontera con España. El castillo, bien conservado con sus almenas y torres, permite a los visitantes explorar libremente su interior, donde se pueden encontrar detalles que encantan a los más pequeños, como los cañones dispuestos en su plataforma.
Antonio Javier Díaz enfatiza la importancia de su posición defensiva: "Situado en lo alto de una colina, se puede observar kilómetros de distancia". Este castillo no solo ofrece una hermosa vista de la naturaleza circundante, sino que también está rodeado de un ambiente tranquilo y bucólico , que deja una impresión duradera en quienes lo visitan. Además, los viajeros recomiendan disfrutar de la experiencia en las festividades locales, como la feria de la castaña, ya que el encanto de Marvão se acentúa en estos eventos que celebran la cultura de la región. Sin duda, el Castillo de Marvão es una joya que merece ser explorada .
Castelo - Castillo de Bragança, por Lala
El castillo de Bragança , una impresionante fortaleza ubicada en la ciudad del mismo nombre, es un punto de referencia que no se puede pasar por alto. Considerado Monumento Nacional de Portugal , este castillo medieval, que data de 1409, destaca por su poderosa torre y sus murallas dobles. Efraim Romero Sacarrera resalta que "este castillo llama la atención y ocupa un lugar destacado en la ciudadela de Bragança", enfatizando su importancia histórica y cultural.
El viajero Juan José Simó Savall menciona que "se conserva la mayor parte de su construcción original en un entorno empedrado ", lo que añade un toque auténtico a la visita. Además, dentro del castillo se encuentra un interesante museo de armas que ofrece un repaso sobre la evolución armamentística en Portugal. Aunque se debe tener precaución con los niños debido a la conservación de los elementos originales, la experiencia es "totalmente recomendable" como apunta María Jesús Garrido , quien también destaca las "vistas inmejorables " que ofrece el recinto.
La zona que rodea el castillo cuenta con varios restaurantes donde se puede disfrutar de una buena comida, lo que la convierte en un lugar ideal para pasar una velada en la encantadora ciudad de Bragança.
Castelo - Castillo de Lamego, por Sasa72
En lo alto de una colina, el Castelo de Lamego se erige con majestuosidad sobre la ciudad, siendo un símbolo de su rica historia. Como señala una viajera, el castillo, construido en el siglo XII y catalogado como Monumento Nacional , "destaca por su impresionante Torre del Homenaje , una estructura almenada de más de 20 metros de altura". Aunque la torre presenta un aspecto algo austero hoy en día, su historia resuena en cada rincón.
El acceso a las murallas se puede realizar por la Porta do Fogo o la Puerta del Sol, lo que permite al visitante explorar la fortaleza y disfrutar de vistas panorámicas de Lamego. Sin embargo, hay que tener en cuenta que "el horario de visitas parece que abre los domingos de 10 a 12 horas y por la semana de 14 a 16 horas". Aunque el castillo estuvo cerrado durante años, las obras de restauración han hecho posible su reapertura, aunque algunos viajeros han encontrado la visita algo decepcionante debido a la falta de elementos en el interior. A pesar de esto, el paseo por las murallas proporciona una experiencia única y gratificante, ideal para aquellos que buscan conectar con el pasado medieval de Portugal.
El Castillo de Palmela , situado en la cima del monte que le da nombre, es una fortaleza medieval que ofrece una experiencia única en la Serra de Arrábida . Según una viajera, es un "enclave repleto de historias, de sitios para descubrir y fotografiar", lo que lo convierte en un lugar ideal para los amantes de la fotografía y la historia. Desde sus murallas, se pueden contemplar "estupendas vistas de toda la comarca " y disfrutar de impresionantes panorámicas de los estuarios de Lisboa y Setúbal, así como de la enigmática península de Troia.
El castillo, que data de 1148, no solo es un atractivo turístico por su historia y arquitectura, sino también por los servicios que alberga, como una oficina de turismo y una cafetería con terraza. Un viajero menciona que "aunque no te hospedes en el hotel, puedes visitar la parte del antiguo castillo", lo que permite a los visitantes disfrutar de su riqueza cultural sin necesidad de alojamiento . Además, se dice que en los días claros es posible ver hasta Lisboa.
Recorrer el castillo puede ser un desafío debido a sus empinadas escaleras y algunos rincones escondidos, por lo que se recomienda llevar calzado adecuado. Sin duda, el Castillo de Palmela es un lugar lleno de encanto donde el pasado y la belleza natural se entrelazan.
Castillo de Santa Maria da Feira, por Nuria G
El Castillo de Santa María da Feira , situado en lo alto de esta encantadora ciudad en el centro de Portugal, es un tesoro arquitectónico que remonta su historia a los siglos XI y XII. Su estructura medieval está bien conservada, permitiendo a los visitantes recorrer sus murallas y torres mientras disfrutan de impresionantes vistas del municipio . Un viajero destaca la experiencia al mencionar que "el día que estuve yo eran fiestas y había juegos infantiles en toda la zona del castillo".
Sin embargo, a pesar de su belleza exterior, algunos visitantes han señalado que el interior del castillo está completamente vacío, y la falta de información histórica es notable. Un viajero expresa su descontento al indicar que "es una pena que su interior se encuentre completamente vacío". No obstante, durante eventos especiales como la feria medieval, el castillo cobra vida, convirtiéndose en el escenario ideal para experimentar el espíritu de aquellos tiempos.
La entrada al castillo tiene un precio accesible de tres euros, lo que lo convierte en una opción atractiva para quienes buscan explorar el patrimonio cultural de Portugal . Sin duda, el Castillo de Santa María da Feira es un lugar que enamora, invitando a todos a descubrir su historia y encanto.
Los castillos de Portugal , con su rica historia y encanto único, ofrecen un viaje inolvidable a través del tiempo . Desde las emblemáticas fortificaciones hasta las menos conocidas que esconden tesoros históricos, cada construcción revela la esencia de un pasado vibrante. Recorrer estos monumentos es una invitación a sumergirse en relatos de caballeros, leyendas y el esplendor de una nación cautivadora.