Calles de Asturias que reflejan la historia y la cultura local Las calles de Asturias son un reflejo vivo de su rica historia y cultura local. Pasear por Oviedo permite admirar su arquitectura medieval y plazas emblemáticas, como la Plaza de la Catedral. En Gijón, la antigua Cimavilla cuenta con rincones que recuerdan la época industrial y marítima. Avilés, con sus calles empedradas, evoca el pasado medieval, mientras que en Llanes se pueden observar edificaciones que narran la historia de la pesca y la agricultura . Cada calle invita a descubrir relatos y tradiciones que han marcado la identidad asturiana.
Calle Gascona, por Lala
Calle Gascona, en pleno corazón de Oviedo, es conocida como "el bulevar de la sidra ". Esta peatonal y animada calle se encuentra cerca de la Catedral y está llena de sidrerías, convirtiéndola en uno de los destinos más populares de la ciudad. Un viajero destaca que "no podéis iros de Oviedo sin tomar algo por Gascona", ya que es ideal para disfrutar de "unos culines" de sidra y picar raciones de auténtica gastronomía asturiana .
Entre los numerosos locales, el viajero jodorado menciona con entusiasmo Tierra Astur, donde se pueden degustar platos como una "tablita de queso" y un "buen chuletón de buey". Sin embargo, hay quienes han tenido experiencias menos satisfactorias, como Jontrifol , quien lamenta haber encontrado opciones de calidad variable en algunos sidrerías, señalando que "una fabada aguada" no cumplió con sus expectativas.
A pesar de las opiniones encontradas sobre la comida, el ambiente siempre es un fuerte atractivo de Gascona. Un visitante como David Alonso Iráculis resalta que es el lugar perfecto para "disfrutar de buen ambiente de sidrería". Calle Gascona ofrece una experiencia única que invita a explorar y saborear la rica cultura asturiana.
Paseo Marítimo de Tapia de Casariego, por Olga
El Paseo Marítimo de Tapia de Casariego es un lugar que invita a la exploración con sus vistas impresionantes del océano Atlántico y la costa asturiana. Este paseo completamente asfaltado y peatonalizado comienza tras cruzar el puerto, donde los viajeros pueden deleitarse con el Mirador de San Blas , desde donde se aprecian la playa y la estatua homenaje a los surfistas.
Los comentarios de quienes han visitado el lugar reflejan su belleza y tranquilidad. Liliana Rancel destaca que, a pesar de encontrarse con "viento y llovizna intermitente", el paisaje era tan cautivador que disfrutaron del paseo en solitario, acompañados solo por el sonido del mar y las gaviotas. La viajera también sugiere que no hay que perderse la oportunidad de reponer fuerzas en la pastelería Palermo tras el recorrido.
Olga , por su parte, resalta los "diferentes entrantes y salientes" de la costa, haciendo del Paseo Marítimo un espacio ideal para conocer la parte costera de Tapia de Casariego. La variedad de playas accesibles desde el paseo y la cercanía del puerto hacen que el lugar sea perfecto para disfrutar de una bebida o una comida después de un día explorando.
Una visita al Paseo Marítimo es una experiencia que combina la naturaleza con la tranquilidad, convirtiéndolo en un destino imperdible para los amantes del mar y la belleza de Asturias.
Paseo del muro de San Lorenzo, por Olga
El Paseo del Muro de San Lorenzo se revela como un imprescindible de Gijón, un recorrido marítimo que transita 1.550 metros frente a la bahía y la playa más emblemática de la ciudad. Este paseo conecta el antiguo barrio de Cimadevilla con la desembocadura del río Piles , ofreciendo una experiencia donde el mar y la ciudad se entrelazan. Como señala el viajero Rafael Vilches , "acompaña a la bahía y a la mayor playa de la ciudad", y sus características escalinatas permiten acceder a la arena en distintos puntos, siendo la primera frente a la iglesia de San Lorenzo.
Con cada paso, se pueden admirar no solo las vistas al océano, sino también la arquitectura del entorno, con edificios modernistas y la Pescadería Municipal destacando a lo largo del trayecto. Según la viajera Olga , "la distancia real serían 5750 metros, señalada cada 250 o 262 metros", lo que facilita conocer el recorrido que se va realizando, desde las termas romanas de Campo Valdés hasta el Parque de la Providencia. Este paseo, más que un simple recorrido, es un lugar de encuentro para los gijoneses y turistas, donde disfrutar de una sidra, pasear al perro o simplemente relajarse al son de las olas.
El barrio de la Calzada, por Patricia Lorden Pato
El barrio de la Calzada en Gijón destaca por su autenticidad y carácter obrero . No es un lugar habitualmente turístico, lo que lo convierte en un descubrimiento fascinante para quienes buscan empaparse de la vida local. Según un viajero, el barrio "no es el más bonito, aunque sí uno de los más grandes y más poblados", lo que refleja su esencia auténtica. Este enclave, antaño hogar de los trabajadores de los astilleros y la siderurgia, mantiene un aire reivindicativo que se puede sentir al pasear por sus calles.
El viajero que menciona su encanto destaca la cercanía a la playa : "hay muchas tiendas y mucha gente", haciendo de la Calzada un lugar muy activo donde disfrutar del comercio local. Además, cuenta con espacios verdes agradables, proporcionando un respiro en medio de la vida urbana. "Es estupendo pasear por la Playa del Arbeyal o los diversos parques que tiene", comenta otro visitante, subrayando la calidad de vida que ofrece el barrio.
Entre los edificios de interés se encuentran el Ateneo de la Calzada y la iglesia de Fátima, que invitan a explorar la rica historia de la zona. Este barrio, aunque menos conocido, ofrece una experiencia única, ideal para quienes desean ver una parte de Gijón alejada de las rutas turísticas convencionales.
Calle Galiana, por Efren Sanchez
La Calle Galiana se erige como un referente en Avilés , atrayendo tanto a locales como a visitantes. Esta encantadora calle peatonal, construida en el siglo XVII, despliega 250 metros de soportales que evocan la rica historia de la ciudad. Los viajeros destacan su ambiente vibrante, donde "es inevitable acabar para tomar algo, especialmente un vino", como menciona Ignacio Izquierdo , reflejando la vida social activa que reina en esta zona.
A lo largo de la calle, los hermosos balcones de las casonas asturianas son un deleite visual, siendo un punto de encuentro para aquellos que buscan disfrutar del ocio. Rafael Vilches señala que "es la zona de ocio en Avilés , con mucho ambiente nocturno por todos los bares y restaurantes", lo que invita a perderse entre sus encantos.
En el recorrido, es fácil encontrarse con elementos que narran el pasado de la ciudad, como la imagen de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros, escondida en uno de los soportales. Además, la presencia de la iglesia de San Nicolás de Bari y la antigua Escuela de Artes y Oficios aporta una dimensión cultural fascinante , convirtiendo la Calle Galiana en un verdadero viaje por la historia avilesina .
Calle La Ferreria, por jrgil
Calle La Ferrería, una de las vías más emblemáticas de Avilés, remonta sus raíces a la Edad Media, cuando era el corazón de la villa. Este atractivo empedrado cuenta con una serie de edificios históricos que cuentan historias de épocas pasadas. Entre ellos destaca la Casa de Valdecarzana, uno de los escasos ejemplos de gótico civil en la provincia, que data del siglo XIV. Otro punto de interés es el conjunto religioso de los Padres Franciscanos, una impresionante mezcla de estilos arquitectónicos que abarca desde el siglo XII al XVIII.
La viajera Concha González Martín comenta que "si pudieras volver al pasado y darle la mano al futuro... estarías en sus calles." Este lugar invita a contemplar la historia mientras se disfruta de la modernidad. Además, la calle, sembrada de soportales que en otros tiempos ofrecían refugio a los artesanos, conecta con otros espacios vibrantes de la ciudad. Al final de La Ferrería se encuentra Casa Alvarín, un encantador local donde deleitarse con una sidra. Para aquellos que buscan un ambiente alternativo, la paralela Calle de Las Alas ofrece una animada zona de copas. Sin duda, La Ferrería es un lugar que ningún viajero debería perderse en su visita a Avilés.
Calle Rivero, por jrgil
La Calle Rivero, ubicada en Avilés, es un testimonio vívido de la historia y cultura de la ciudad. Esta vía peatonal, que arranca en la plaza del Ayuntamiento y se extiende hasta la Avenida Cervantes, está rodeada de numerosos soportales que invitan a pasear y disfrutar de su encanto. Según un viajero, es “la antigua calle de la movida en Avilés” y actualmente es un lugar frecuentado por la juventud, aunque todavía alberga "algunos lugares decanos del lugar" con sus respectivas clientelas fieles.
Con al menos cinco siglos de historia, la Calle Rivero es mencionada por primera vez en un acta municipal de 1485. En sus orígenes, era un arrabal que se encontraba fuera de las murallas, y durante el siglo XVII se convirtió en una importante vía que conducía al Camino Real hacia Oviedo. Destaca por su cercanía a la ría avilesina , lo que le da su nombre, y en uno de sus extremos se encuentra la casa donde vivió el escritor Armando Palacio Valdés, un detalle que no pasa desapercibido para los visitantes.
Un viajero describe este espacio como “un paseo obligado”, y sin duda, el movimiento constante de gente y el acceso al Parque de Ferrera lo convierten en un lugar imperdible para quienes recorren Avilés. Esta calle, que ha conservado su encanto a lo largo de los siglos, sigue siendo un punto de encuentro entre el pasado y el presente de la ciudad.
Calle Braulio Busto, por Yoli ChamBa
La Calle Braulio Busto es, sin duda, una de las arterias más emblemáticas y transitadas de Candás, un lugar que invita a los visitantes a explorar su vibrante ambiente. Comenzando en la Plaza de la Baragaña, la calle desemboca en la comisaría local y la oficina de turismo, convirtiéndola en un acceso habitual al mar . Según un viajero, “la gente acude a ella para pasear y normalmente se suele convertir en punto de encuentro ”.
En esta animada calle, los amantes de las compras pueden disfrutar de una variedad de tiendas que ofrecen productos típicos y souvenirs de la región. Las cafeterías y pastelerías son perfectas para hacer una pausa y saborear delicias locales mientras se observa la vida pasar. En verano, el ambiente se anima aún más con la presencia de artistas callejeros: “es fácil encontrar algún mimo y músicos callejeros”, lo que añade un aire festivo a la experiencia.
Un turista destaca que la Calle Braulio Busto es “ideal para un paseo”, lo que refleja su atractivo tanto para los locales como para los visitantes que buscan descubrir la esencia de Candás. Este rincón de Asturias te invita a sumergirte en su historia y a disfrutar de cada instante en sus adoquinadas calles.
Paseo de la Estacion del Vasco, por Yoli ChamBa
El Paseo de la Estación del Vasco en Mieres es un lugar que evoca la rica historia de la ciudad y la evolución del transporte en la región . Este paseo se sitúa en el lugar donde antiguamente estuvo la estación del ferrocarril vasco-asturiano, inaugurada en 1904. Aunque la estación fue trasladada a un área más alejada, "el edificio de la antigua estación y la marca de las vías aún son visibles", según comenta un viajero. Este pasaje, transformado en vía peatonal, invita a los visitantes a disfrutar de un agradable paseo.
El entorno también ofrece zonas verdes y juegos infantiles , proporcionando un espacio ideal para las familias . "Es un lugar emblemático de Mieres, muy bonito con parques cerca para los niños," destaca otra viajera sobre el atractivo del Paseo. A pesar de su reciente renovación, algunos visitantes expresan sus preferencias por otros paseos de la ciudad, pero el encanto del Paseo de la Estación del Vasco radica en su historia y su función como pulmón verde de la zona . Sin duda, es un espacio que merece ser explorado por quienes desean conocer más sobre la herencia cultural de Mieres .
Calle Mayor de Llanes, por Olga
La Calle Mayor de Llanes es un pintoresco rincón que invita a los visitantes a sumergirse en la vida del casco antiguo de este encantador pueblo asturiano. A pesar de su nombre, la calle es "muy pequeña, empedrada y muy estrecha", lo que le otorga un carácter especial que enamora a quienes la recorren. A partir de las 6 de la tarde, "se anima muchísimo" con la llegada de los lugareños y turistas que se deleitan en sus numerosos restaurantes, sidrerías y tiendas.
La experiencia de pasear por sus adoquinadas aceras es un viaje en el tiempo, donde cada esquina cuenta una historia. Muchos viajeros destacan su belleza, mencionando que es "una bonita calle" que refleja la esencia de Llanes. Además, es un lugar ideal para disfrutar de la gastronomía local y dejarse llevar por el ambiente jovial que se respira al caer la tarde. Un recorrido por la Calle Mayor no solo es una oportunidad para descubrir sabores, sino también para empaparse de la historia viva de este encantador destino asturiano.
Paseo de la Ría, por Lala
El Paseo de la Ría en Avilés se ha transformado en un atractivo destino para los amantes de la naturaleza y la historia. Este renovado espacio, que se extiende a lo largo de 3 kilómetros desde el puerto pesquero hasta el Centro Niemeyer, ofrece una experiencia tranquila en la que se combinan paisajes marítimos y esculturas emblemáticas . Lala menciona que “el resultado es un amplio y agradable paseo marítimo” donde se pueden apreciar panoramas de la evolución de la ría a través de paneles con fotografías antiguas.
Ignacio Izquierdo destaca que “uno de los paseos más tranquilos, relajantes y bonitos” se encuentra bordeando esta ría, donde el recorrido de unos 5 kilómetros se hace cómodo gracias a su escaso desnivel. A lo largo del paseo, los viajeros pueden disfrutar del puerto deportivo y de la escultura “Avilés”, que representa la identidad de la ciudad. Además, el acceso al Parque del Muelle permite adentrarse en el casco histórico, convirtiendo cada visita en una invitación a explorar. Sin embargo, Alberto Vaz Gomez subraya la necesidad de seguir mejorando la calidad del entorno, reconociendo que “mientras esté la fábrica al lado, seguirá muy sucia la mar”. A pesar de ello, Charo Huerta resalta que “merece la pena pasear hasta el Niemeyer”, lo que lo convierte en un recorrido imperdible en Avilés .
Paseo maritimo, por Yoli ChamBa
El Paseo Marítimo de Candás , recientemente inaugurado tras un periodo de obras, se ha convertido en un encantador punto de encuentro en la costa asturiana . Los visitantes destacan que "las obras merecieron la pena", ya que el paseo ofrece un recorrido agradable que bordea la playa de Candás y la Playa de la Palmera. Este trayecto no solo conecta la localidad con Perlora, sino que también incluye la Plaza de La Armada, un hermoso lugar donde disfrutar del ambiente local.
El Paseo Marítimo es ideal para quienes desean realizar actividad física o simplemente caminar y relajarse. Un viajero menciona que se trata de "un paseo ideal para hacer deporte o caminar ", lo que lo convierte en un espacio versátil para todos. Al inicio del recorrido, se encuentra el Hotel Marsol , el más destacado de Candás, lo que añade un toque de historia y confort a la experiencia.
Recorrer este paseo es una invitación a explorar y disfrutar de la belleza del litoral asturiano , un lugar donde cada paso cuenta una historia.
Calle Real de las Rozas, por Javier de las Cuevas
La Calle Real de las Rozas es un lugar que invita a la exploración y ofrece una experiencia única al recorrer su ambiente peatonal. Esta calle atraviesa el casco urbano del municipio, conectando el antiguo cuartel de la Guardia Civil con la Plaza de España, y es famosa por sus vistas que conmueven , especialmente con el telón de fondo de las cumbres de la Sierra de Madrid. El viajero Javier de las Cuevas destaca que "es una calle peatonal con vistas", lo que subraya su atractivo.
A lo largo de su recorrido, la calle está animada por numerosos comercios, bancos y supermercados, convirtiéndola en un verdadero centro de vida social . Diana Rodriguez menciona que es "una calle peatonal que tiene muchos comercios", lo que añade a su dinamismo. Sin embargo, no todas las opiniones son plenamente positivas. Luis Otero Bailon aporta una visión crítica, señalando que la calle "es un proyecto inacabado o no totalmente realizado", lo que sugiere que hay aspectos a mejorar. Pese a las críticas, la tranquilidad y belleza del lugar son reconocidas. Isabella Huncal describe la calle como "muy bonita y tranquila", lo que la convierte en un espacio ideal para pasear y disfrutar. Sin duda, la Calle Real de las Rozas es un espacio que alberga múltiples historias y experiencias.
C/ La Colegiata, por Comarca de la Sidra
En el corazón de Nava , la calle La Colegiata se convierte en un escenario donde el pasado y el presente se entrelazan armoniosamente. Este lugar alberga las antiguas Escuelas Graduadas de La Colegiata , un edificio que data de 1935 y que ha sido testigo de la evolución de la educación en la localidad. El viajero de Comarca de la Sidra transmite el encanto de este rincón al mencionar que “los niños de 3 a 5 años comparten espacio, educación, juegos y hasta afición por la huerta”, resaltando un pequeño huerto que han cultivado con ayuda de sus profesores. Es un ejemplo palpable de cómo la comunidad escolar fomenta el aprendizaje práctico y la colaboración.
Además de su relevancia educativa, La Colegiata ofrece un ambiente tranquilo ideal para disfrutar de la vida diaria. Según la viajera Maria Neira Mendez , esta zona “tiene todo a mano”, con supermercados, carnicerías, fruterías y librerías a poco más de 200 metros. También destaca un bonito restaurante y la cercanía de un hotel con cafetería, lo que convierte a La Colegiata en un lugar acogedor y económico para establecerse. La tranquilidad del entorno, unida a la vibrante vida local, convierte a esta calle en un punto que invita a explorar y disfrutar de la esencia de Nava.
Cada calle en Asturias se convierte en un hilo que une historias, tradiciones y paisajes que enriquecen la vivencia de quienes las recorren. Desde la animada calle Gascona hasta el sereno Paseo de la Ría, cada paso invita a sumergirse en un relato único. La riqueza cultural y arquitectónica de estos paseos no solo embellece, sino que también conecta a los visitantes con el corazón de esta tierra fascinante.